Víctor Vázquez, productor, director, escritor y actor de teatro, con más 14 años de trayectoria en los escenarios, actual director de la empresa teatral La Casa Azul Producciones, llegó de manera accidental a este arte. Cuenta que una vez acudió como acompañante a una clase de teatro, en medio de la escena, y a manera de improvisación, el profesor lo animó a participar en la trama. El desenvolvimiento nato que Víctor presentó en la obra hizo que las personas ahí presentes y, sobre todo él mismo, reconocieran que cualquier camino que tomara su vida, el teatro tendría que estar incluido en ella
Años después de esa experiencia, Víctor fundó su empresa teatral en las que ofrecía obras escritas por él mismo y algunas inspiradas por otros dramaturgos. El éxito le sonrió benévolo, por lo que comenzaron a realizar giras por el interior del país con llenos totales en distintos recintos de México.
Víctor Vázquez, el emprendedor y su visión.
Como todo emprendedor, su visión fungía en dedicarse de manera total a su pasión y poder vivir de ello, por lo que decidió mudarse a la Ciudad de México para presentarse de manera local con sus obras. Víctor y compañía, ya contaban con el teatro rentado y habían pactado varias fechas cuando las autoridades sanitarias ordenaron el cierre de recintos debido a la pandemia mundial.
Una de las soluciones que encontraron fue realizar teatro en línea. El 19 de marzo se llevó a cabo la primera función y en lo consecuente han podido seguir trabajando, sin embargo los ingresos no han sido lo suficientes como lo eran cuando el teatro era presencial, lo que ha llevado a Víctor a plantearse seriamente la idea de emprender un negocio alterno, no relacionado con el arte, para poder llevar ingresos a casa y con toda tranquilidad poder seguir dedicándose al teatro.
El cambio más difícil al que se ha tenido que adaptar es a la soledad de actuar frente a una cámara, sin esa retroalimentación y energía que suele dar el teatro cuando se está cara a cara con el público, el limitar el desarrollo de la historia y los accesorios a un espacio reducido cuando la obra fue escrita originalmente para interpretarse en un escenario.
La visión de Víctor referente al teatro no es muy alentadora, pero tiene su razón de ser. La sociedad demostró en más de una ocasión que el teatro, entre otras actividades culturales, no son esenciales. Se presenciaron muestras de rechazo al cierre de bares, estadios, casinos, entre otros; cuando hubo escases de cerveza en diferentes lugares del país, las filas para comprar esta bebida era inmensa, sin embargo los recintos culturales quedaron rezagados y a la mayoría pareció no importarles, es por eso que al momento de regresar paulatinamente a la normalidad, las actividades culturales no tienen un panorama muy favorable.
En todas las expresiones de arte, así como en otros rubros, la incertidumbre pesa demasiado estos días. Nadie sabe cuándo terminará esta situación y si terminará pronto, pero si algo tiene el arte, es que ha sido capaz de sobrevivir y adaptarse a diferentes circunstancias y esta no es la excepción, la pregunta es, ¿será benéfico para los que se dedican a las artes? El tiempo lo dirá.
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POR | BETSABE MARTÍNEZ
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